El mercaderista y el promotor son el enlace final entre la marca y el consumidor; y su capacidad de persuasión es determinante en una decisión de compra.

Desempeña una función clave, para que un consumidor se decida por los productos que distribuye su empresa o se incline por buscar opciones en las marcas de la competencia.

Es buen mercaderista o promotor el que muestra una alta capacidad para negociar y comunicarse; el que toma decisiones con el más acertado criterio y el que conoce los detalles de cada producto.

Entre sus diversas funciones, están: 

• Informar sobre las características, beneficios y precios de los productos.
• Demostrar cómo se usan y cómo funcionan los productos.
• Organizar puntos de exhibición y promoción y distribución de muestras.
• Organizar y exhibir los productos en establecimientos comerciales.
• Si los productos son alimenticios, ofrecer muestras de degustación.
• Contactar personas y negocios para impulsar la venta de bienes o servicios,
• Visitar establecimientos comerciales para promocionar productos o servicios.
• Elaborar inventarios, hacer pedidos y rendir informes sobre ventas diarias en el correspondiente punto de venta.

Para instalar cada punto de exhibición y promoción de bienes o servicios, y darle mantenimiento, el mercaderista, así como el jefe del departamento para el que trabaja, deben contar con una permanente actualización de etiquetas, relación de inventarios, control de órdenes de compra, recepción de despachos y, lógicamente, una amplia información sobre las características de cada producto y su marca.

De ahí la importancia de que el mercaderista y el promotor cuenten con un instrumento que les suministre un control ágil y eficaz de la información relacionada con las características de cada producto, existencias, precios, avances de ventas, facturas emitidas y los estados de cuentas de los clientes, y que, al mismo tiempo, le permita emitir facturas, hacer pedidos, realizar cálculos matemáticos, entre otras funcionalidades propias de la dinámica empresarial de hoy.

Todas estas tareas están concebidas en Pepperi, una plataforma diseñada para la optimización de rutas comerciales y puestos de demostración y ventas, integrada por más de 60 sistemas de planificación de recursos empresariales.

Un encuentro de excelencia

Pepperi es un punto de encuentro entre el mercaderista o promotor, la empresa y el cliente. Si los productos llevados a exhibición no parecen suficientes, la plataforma facilita el acceso a catálogos en alta resolución, documentos en PDF adjuntos y enlaces a videos que ofrecen respuestas a todas las inquietudes que pueda tener un cliente potencial.

También permite realizar una larga lista de operaciones, como fijar objetivos, dar seguimiento a las actividades, enviar emails a representantes y responsables con la información que necesiten, realizar pedidos a alta velocidad con unidades de medida, cantidades mínimas y por caja, múltiples tarifas con políticas de descuento, indicadores para debajo del precio mínimo y sin stock, fechas de pedidos futuros.

Con Pepperi, el mercaderista no está solo; puede registrar, visualizar y proyectar el trabajo que está realizando, la interacción con cada uno de los clientes potenciales, gestionar y programar llamadas, reuniones y correos electrónicos, cuadros de mando detallados y localización GPS para cada cliente, códigos de color para los nuevos contactos, etc.

El promotor no necesita que termine la jornada laboral o la gira para rendir un informe al jefe y accionar los mecanismos administrativos de la empresa. Todo lo puede manejar fácilmente, sobre la marcha, desde un dispositivo móvil.

En IMR S.A ponemos a su disposición Pepperi; nosotros somos su opción en aplicaciones empresariales, en Panamá.